Disfrute de la legendaria belleza de los diecisiete Parques Nacionales de Tasmania.
Muchos de estos parques forman parte de la reserva natural, Patrimonio de la humanidad, que ocupa el veinte por ciento de la isla. En la cordillera Hazard Ranges quédese sin aliento con las vistas dignas de una postal de Wineglass Bay, en el Parque Nacional de Freycinet. Vea el reflejo de su rostro en el lago Dove y recorra a pie la ruta Overland Track en el Parque Nacional de Cradle-Mountain-Lake St. Clair. Dé un paseo por la selva tropical de Gondwanan y descubra el jardín francés del siglo XVIII de la bahía de Recherche, en el Parque Nacional de South West. Vaya a ver las cataratas de Russell, los altísimos eucaliptos de los pantanos y las pistas de esquí en el Parque Nacional de Mount Field. Navegue por el tranquilo río Gordon y descienda las rápidas aguas del Parque Nacional de Franklin in Franklin-Gordon Wild Rivers. Sea cual sea el recorrido que escoja a través de las maravillas naturales de Tasmania, estamos seguros de que no querrá marcharse nunca de estas tierras.
CINCO MARAVILLAS NATURALES DE TASMANIA QUE NO DEBE PERDERSE:
Cradle Mt – Lake St Clair National Park
1. El Parque Nacional de Freycinet y Wineglass Bay
Pase la noche en la tranquila bahía de Coles a la entrada del Parque Nacional de Freycinet, y recorra a pie el camino hasta llegar a Wineglass Bay. Allí, capture con su cámara paisajes idílicos y, pruebe cualquiera de las opciones de ocio que le ofrece esta maravillosa playa de arenas blancas, como darse un baño, navegar , pescar , practicar snorkel, kayak o buceo . Si desea estirar las piernas, opte por deportes como escalar, hacer rappel, o excursiones a la montaña en las escarpadas formaciones rocosas de granito rosáceo y gris de la cordillera Hazard Ranges. También tiene la alternativa de caminar por los brezales costeros.
2. El Parque Nacional de Cradle-Mountain-Lake St Clair
Entre estos parajes naturales, que se encuentran a tan sólo dos horas en coche desde Launceston, podrá retroceder millones de años,. Camine por los alrededores del lago Dove, entre cataratas y bosques de pinos King Billy, hasta llegar a los irregulares picos de dolomita de Cradle Mountain. Para vivir todo un desafío, siga la famosa ruta Overland Track, de 80 km. hacia el sur, hasta llegar a Lake St, Clair, el lago natural más profundo de Australia. En el camino, quédese maravillado ante Mount Ossa, la montaña más alta de Tasmania, y observe un tipo de haya de más de 60 millones de años. Recorra las riberas de los ríos que bajan en cascadas y los espesos bosques de árboles centenarios en Enchanted Walk; o dedique la mayor parte del día en cumplir la hazaña de llegar hasta la cumbre. Puede también dedicar de una a cinco horas en una excursión por los famosos senderos, entre los que se incluyen Mount Campbell, Hanson’s Peak, Twisted Lakes, Lake Rodway, Lake Lilla y Ballroom Forest.
Southwest National Park,
Tasmania
3. El Parque Nacional del Sudoeste
Salga en automóvil desde Hobart y contemple la enorme presa de Scotts Peak Dam y los altos picos de Mount Anne, Mount Eliza y Western Arthurs, a orillas del lago Pedder. O bien, vea a vista de pájaro en un vuelo panorámico las 608 000 ha del parque del bosque selvático de Gondwanan, los matorrales y el extraño pino de Huon. Dé un paseo por la presa de Gordon Dam o atrévase a descender haciendo rappel en su sorprendente abismo. Encuentre al papagayo de vientre naranja, en peligro de extinción, en los alrededores de Bathurst Harbour, durante los meses de octubre y marzo. Serpentee entre los árboles cubiertos de musgo y troncos gigantes durante la breve ruta Creepy Crawly Nature Trail. O una excursión de un día por el profundo Lake Judd, tallado en el hielo. Disfrute de algunos de los parajes más desafiantes de Australia en las rutas que duran varios días de Port Davey y South Coast Tracks hasta llegar a la recóndita Melaleuca, donde tendrán que ir a buscarle en avión. Acérquese en kayak hasta la bahía Recherche, donde encontrará un jardín francés del siglo XVIII, rodeado de espesos bosques y espectaculares playas de arenas blancas.
4. El Parque Nacional de Mount Field
Solo tiene que conducir una hora en automóvil desde Hobart para contemplar los tres niveles de las cataratas Russell, exuberantes bosques de helechos y algunos de los árboles más altos del mundo. Camine hasta llegar a las cataratas de Lady Barron, después de pasar por el lago Dobson, los bosques de pandani y los bosques de altísimos eucaliptos de los pantanos en Lady Barron Falls Circuit. Suba un poco más alto, hasta llegar a los altiplanos y precipicios de Tarn Shelf, donde podrá contemplar los grandes lagos en el valle que se divisa al fondo. En los meses de abril y mayo, las laderas de las montañas se vuelven un espectáculo con las hojas de tonos dorados, rojizos y naranjas del fagus, el único árbol caducifolio invernal de Australia. En los meses invernales, entre junio y agosto, podrá disfrutar de pequeñas pistas para practicar esquí de fondo entre los eucaliptos de nieve y pinos raquíticos.
Franklin-Gordon Wild Rivers National Park, TAS
5. El Parque Nacional de Franklin-Gordon Wild Rivers
Realice un inolvidable crucero por el majestuoso río Gordon desde el pueblo pesquero de Strahan, ubicado en la costa oeste. O conduzca hasta llegar a los espectaculares paisajes de la serpenteante autopista Lyell Highway. Una vez allí, puede descender las rápidas aguas del embravecido río Franklin, hasta llegar a valles boscosos, profundos desfiladeros y montañas talladas por los glaciares. Conozca la historia de cómo los manifestantes ecológicos salvaron esta fuerza de la naturaleza e impidieron la construcción de una presa hidroeléctrica. En barco, puede también bordear la costa por los ríos Picton y Huon, que se encuentran casi a la misma distancia de Hobart. Siga la ruta Donaghys Lookout Walk para disfrutar de vistas del río Franklin o las cumbres montañosas. O emprenda la desafiante ruta de varios días Frenchmans Cap Track hasta llegar a llanuras de Dactyloctenium radulans, valles glaciales y selváticos bosques, que albergan al legendario pino de Huon y al pino King Billy. Su destino es el lago Tahune, situado debajo del imponente pico de Frenchmans Cap, que alberga algunas de las rocas expuestas más antiguas de Australia.
